Un destornillador es una herramienta manual diseñada para apretar o aflojar tornillos. Consiste en un mango o empuñadura que permite sujetarlo con comodidad y una punta en forma de ranura, cruz, estrella u otro tipo, que encaja en la cabeza del tornillo.
Al aplicar fuerza y girar el mango, el destornillador permite realizar movimientos de rotación para realizar el apriete o desapriete de los tornillos en diversos objetos y superficies. Los destornilladores son herramientas comunes y esenciales en trabajos de bricolaje, carpintería, electrónica y otras áreas donde se requiere el uso de tornillos.
Existen varios tipos de destornilladores, cada uno diseñado para adaptarse a diferentes tipos de tornillos y aplicaciones. Algunos de los tipos más comunes son:
- Destornillador de cabeza plana: Tiene una punta plana en forma de ranura, ideal para tornillos con cabezas en forma de ranura recta.
- Destornillador Phillips: Presenta una punta en forma de cruz, adecuada para tornillos con cabezas en forma de cruz, también conocidos como tornillos Phillips.
- Destornillador Pozidriv: Similar al destornillador Phillips, pero con una punta en forma de cruz más profunda y con cuatro puntos adicionales. Se utiliza en tornillos Pozidriv, comunes en aplicaciones industriales.
- Destornillador Torx: Tiene una punta en forma de estrella de seis puntas, utilizada para tornillos con cabezas Torx, comunes en electrónica y aplicaciones automotrices.
- Destornillador Allen: Diseñado para tornillos con cabezas hexagonales internas, también conocidos como tornillos Allen o tornillos hexagonales.
- Destornillador de punta cuadrada: Presenta una punta cuadrada y se utiliza principalmente en trabajos de carpintería tradicionales.
Estos son solo algunos ejemplos de los tipos de destornilladores más comunes. Cada tipo de destornillador está diseñado para un propósito específico, por lo que es importante elegir el adecuado según el tipo de tornillo con el que se vaya a trabajar.